Regantes del Maule y del Bío Bio dijeron no a la reforma al Código de Aguas en multitudinario debate efectuado en Linares

(Domingo 12 de marzo de 2017).- Más de mil regantes de las regiones del Maule y del Bío Bío asistieron al debate sobre la Reforma al Código de Aguas que se efectuó este viernes 10 de marzo en el Teatro Municipal de Linares y que contó con la participación de los senadores Víctor Pérez Varela, Juan Antonio Coloma, Jacqueline van Rysselberghe y Hernán Larraín.

La convocatoria a esta actividad, que se extendió por casi tres horas, tuvo tal éxito que, inclusive,  debió ser seguida por más de un centenar de asistentes desde la calle, gracias a una pantalla gigante instalada, debido a que la capacidad del recinto municipal estaba sobrepasada, con mucha gente siguiendo las intervenciones de pie en los pasillos y escaleras. La moderación de la discusión estuvo a cargo de la Editora de la Revista El Campo de El Mercurio, Patricia Vildósola; del periodista y conductor del Programa El Agro de Radio Agricultura, Francisco Contardo; y de la regante e Ingeniero Agrónoma  del Maule, Anita Prizant.

A este debate fueron invitados todos los senadores de ambas regiones y de la Comisión Especial de Recursos Hídricos, Desertificación y Sequía de la Cámara Alta, quienes no asistieron. La ausencia de los parlamentarios pertenecientes a partidos de Gobierno generó total rechazo en los asistentes, quienes respondieron con una fuertes pifiadera durante la lectura de las excusas enviadas por ellos.

Las temáticas que más se reiteraron, tanto en las exposiciones como en el debate, tuvieron relación con algunos mitos que han sido instalados en esta reforma por quienes la propugnan como, por ejemplo, que los grandes agricultores son dueños del agua y que especulan con ella, cuando ha sido la propia Dirección General de Aguas quien ha señalado que la gran mayoría de los más de 400 mil los usuarios de agua son pequeños y medianos agricultores. Del mismo modo, aquél que afirma que en Chile existe un problema de escasez hídrica, cuando la realidad internacional demuestra que en nuestro país hay mucha agua; de hecho, hay nueve veces más agua por habitante que el promedio mundial, el problema es que no se construyen embalses y el 84% del recurso hídrico que corre por los ríos se vierte en el mar sin ser usado para ninguna actividad.

Otras temáticas que también estuvieron muy presente en el análisis fueron la relacionada con el caudal ecológico, que provocará que en algunas partes del país no se pueda regar más allá de diciembre; el traspaso de atribuciones a la Dirección General de Aguas, que no estaría en condiciones de poder regular eficazmente la distribución del agua; y el cambio del término propietario por el de titular.

Respecto de esto último, el senador Hernán Larraín advirtió que “esto es una verdadera expropiación de los derechos de los regantes, porque por mucho que se diga que se va a referir a los derechos futuros, los actuales regantes que tienen un derecho de propiedad sobre los derechos de aprovechamiento quedan sometidos a la nueva ley, que le entrega atribuciones totales a la Dirección General de Agua. Hay una transferencia de atribuciones desde las juntas de vigilancia hacia las autoridades administrativas. Por lo tanto, los regantes pasan a tener incertidumbre jurídica y a exponerse, incluso, a ser expropiados sin recibir indemnización”.

En el mismo sentido, el Director de la Junta de Vigilancia del Río Ñuble, Martín Arrau, indicó que los principales reparos a esta reforma que se tramita actualmente en el Senado dicen relación con que “el derecho de aprovechamiento de agua se acaba y pasamos a tener permisos temporales de máximo 30 años que pueden ser caducados o redistribuidos por múltiples razones, como interés público, razones productivas a juicio de la autoridad de turno. Adicional a ello, se subestima las capacidades administrativas y de gestión de los propios usuarios, que son las juntas de vigilancia y las asociaciones de canalistas, y se reemplaza por una mayor intervención del Estado”.

Del mismo modo, agregó que “el Fisco tiene más de 40 proyectos de embalses durmiendo, que alcanzarían para regar 300 mil hectáreas adicionales, para que dejemos de sufrir la sequía temporal que tenemos en los períodos de verano. La verdad es que esta reforma no aporta un litro más de agua al sistema. Lo que necesitamos es mayor gestión e infraestructura”.

Por su parte, el Presidente de la Junta de Vigilancia del Río Maule, Carlos Diez, agregó que esta reforma “afectará por sobre todo a los pequeños agricultores, ya que se les está quitando su derecho de propiedad. No lo podrán hipotecar ni heredar y, frente a esta situación, creemos que es inconstitucional que este Gobierno esté quitando un derecho que ha sido de por vida. Sabemos que es un uso para todo el mundo, pero nosotros tenemos el derecho a usarlo en la agricultura y a lo largo de los años hemos ido haciendo millonarias inversiones para hacer un buen uso del agua”.

De hecho, el Senador Juan Antonio Coloma expresó que en esta actividad se dio una señal clara de que la agricultura sin agua es imposible. “Me siento feliz de haber participado en este hito. Estoy seguro que aquí hay un antes y un después. La fuerza de la razón, la fuerza de la voluntad, la fuerza de la energía de los agricultores quedó clara y estoy seguro que esto se va a escuchar en  aquéllos que creían que no iba a pasar nada con la aprobación de esta ley y hoy saben perfectamente que el mundo agrícola se ha movilizado, que ha dado un rotundo no a esta reforma”, sentenció.

Uno de los moderadores del debate, Francisco Contardo, comentó que es muy importante que los agricultores tengan posibilidad de escuchar la argumentación respecto de un proyecto de ley tan relevante como éste, que ha sido tan polémico, y que tengan la posibilidad de expresarse. Creo que este lleno total muestra el gran interés de ellos por esta temática”.

“Creo –prosiguió– que lo que más les preocupa a los regantes son todos los efectos que tiene el perder derechos que de alguna manera ellos ya tienen y que, por ejemplo, en temas de financiamiento les signifique un freno respecto a lo que hoy día pueden acceder, debido a que el agua es algo que efectivamente, por ejemplo, en la banca se toma en consideración al momento de tener garantías para su terreno”.

Al cierre del evento, tomó la palabra el Presidente de la Confederación Nacional del Transporte de Carga de Chile, Sergio Pérez, quien dirigió un encendido discurso de apoyo a los regantes, en el cual comprometió el apoyo de su gremio a esta casusa, haciendo hincapié en que camioneros y agricultores pueden hacer cambios y pedir acciones concretas si están unidos y trabajan juntos. “Consideramos muy dañina esta reforma porque si no reconoce derechos ancestrales respecto de la propiedad, y esto es una estatización del agua en el fondo, los terrenos frutícolas y agrícolas sin agua no tienen vida”.

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